No, tú no. Tú. Los ejecutivos no están tan entusiasmados con DevOps como aquellos que están en las trincheras, y la respuesta puede encontrarse en una de estas tres preocupaciones clave.
Las organizaciones de alto rendimiento no solo han adoptado, sino que han adoptado, DevOps. El informe fundamental sobre el estado de DevOps de Puppet Labs nos ha demostrado esto durante los últimos dos años, y me imagino que volverá a reforzar esa relación el año que viene. Según una serie de encuestas y estudios de la industria, las organizaciones están adoptando DevOps. Pero, así como en el pasado se adoptaron metodologías de desarrollo de aplicaciones ágiles y eficientes, adoptar no siempre significa lo que creemos que significa. Resultó que lo que las organizaciones realmente quieren decir cuando hablan de “adoptar métodos ágiles” para el desarrollo de aplicaciones es que un porcentaje relativamente pequeño de sus proyectos utilizaban métodos ágiles. Eso no significaba que se hubieran lanzado a lo grande y hubieran dado el salto radical aceptándolo para cada proyecto.
Lo mismo parece ser cierto para DevOps, donde los encuestados lo están adoptando con entusiasmo y obteniendo resultados, pero los ejecutivos en general todavía parecen ser tibios con el enfoque, aumentando solo dos puntos porcentuales en "impacto estratégico" año tras año, del 15% en 2016 al 17% en 2017, según nuestra encuesta sobre el estado de la entrega de aplicação . Si bien los arquitectos de la nube y los roles autoidentificados como “DevOps” pueden estar plenamente comprometidos con su iniciativa DevOps, e incluso haber superado el muro en producción, los ejecutivos aún están rezagados en la adopción de este enfoque. Lo que realmente significa que las “organizaciones” no necesariamente adoptan DevOps por completo.
Hay tres preocupaciones clave que probablemente sean responsables de impedir que los líderes de TI y de negocios le den a DevOps la cálida bienvenida que merece.
Existen otras preocupaciones, por supuesto, pero principalmente estas tres preocupaciones clave resuenan en todos los centros de datos y a lo largo del tiempo cuando se trata de la adopción de tecnología y metodología. Toma tiempo, puede ser disruptivo y hay grandes posibilidades de que haya un estancamiento. La debida diligencia y un enfoque reflexivo de la implementación, junto con una actitud de invertir ahora y beneficiarse después, pueden aliviar esas preocupaciones y generar una mejor posibilidad de sentar con éxito una base firme pero flexible que no solo permita sino que acelere la transformación digital necesaria para que el negocio crezca ahora y en el futuro.